Detectores de presencia para hoteles

Los detectores de movimiento para iluminación en hoteles son una excelente opción de sostenibilidad y ahorro porque permiten encender las luces solo cuando es necesario, reduciendo significativamente el consumo energético y los costos operativos. Además, prolongan la vida útil de las luminarias al disminuir el tiempo de uso, lo que también reduce el mantenimiento. Todo esto se logra sin afectar la comodidad del huésped, ya que el sistema funciona de forma automática y eficiente.

Ahorro energético

Cumplimiento normativa

Integrable en tu sistema

Diseño adaptable al hotel

¿Cómo funcionan los detectores de presencia?

Los detectores de movimiento para iluminación funcionan mediante sensores que detectan la presencia de personas en un área determinada, generalmente usando tecnología infrarroja (PIR) o microondas. Cuando el sensor percibe movimiento, envía una señal que activa la iluminación; si no detecta actividad durante un tiempo preestablecido, apaga automáticamente las luces. Este proceso es completamente automático y puede ajustarse según el nivel de sensibilidad y el tiempo de espera deseado. 

Preguntas frecuentes sobre detectores de presencia para hoteles

Los más comunes son los detectores de movimiento por infrarrojos (PIR) o tecnología dual (infrarrojos + ultrasonidos), ideales para habitaciones, pasillos, baños y zonas comunes.

Sí, muchos modelos permiten instalación superficial o empotrada sin necesidad de reformas, aprovechando la infraestructura eléctrica existente.

Sí, la mayoría son compatibles con sistemas domóticos, tarjetas llave y soluciones de gestión energética, lo que permite un control más eficiente.

Dependiendo del uso y la zona, se puede llegar a ahorrar entre un 20% y un 40% del consumo en iluminación y climatización.

Diseñamos espacios únicos para cada hotel, adaptándonos a sus necesidades específicas, al estilo del establecimiento y al perfil de sus huéspedes.

Cada dispositivo permite configurar el tiempo de inactividad tras el cual se apaga la luz o el sistema conectado (normalmente entre 30 segundos y 3 minutos).

No necesitan mantenimiento técnico frecuente, solo limpieza periódica del sensor para evitar acumulación de polvo.

Los diseños actuales son discretos y minimalistas, pensados para integrarse en ambientes de hotel sin alterar la estética.

En habitaciones, se suelen usar en combinación con sistemas de tarjeta llave o sensores térmicos para evitar apagados no deseados.

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